Daniel Veronese versiona y dirige el clásico de Jean Cocteau, de 1938, “Los Padres Terribles”.
Esta propuesta de la que Daniel Veronesa versiona y dirige el clásico de Jean Cocteau que se estrenara por primera vez en 1938. Queda demostrado que resalta como si fuera una familia disfuncional, en la que los padres, la tía solterona y el hijo que está sobre protegido por el padre, tienden a crear un ambientemás extraño. Pareciera ser que es una comedia de enredos, en la que nos cuestionamos todo sobre los lazos amorosos. Querremos ver si los sentimientos son reales o no. Resulta ser que un joven se enamora de una mujer mucho mayor que él y que ella está en pareja con otra mujer que le está ayudando a pasar un trance difícil. Se plantea la situación de dejarla con el fin de seguir adelante con el joven. Así veremos cómo interfiere la familia y la sorpresa con la que nos encontramos como para no dejar nada sin suponer y llegar a vivir de manera más que auténtica. El director hizo un “pequeño” cambio de notable eficacia: los roles de los padres están invertidos, de modo que la madre original –Yvonne– aquí se ha transformado en el padre, Ivo (Luis Ziembrowski), y los conflictos del padre original –Georges– están aquí encarnados por la madre, Andrea (Ana Katz). Con un vestuario en los que resaltan los colores y que afecta a los cuerpos en movimientos, sentimos que esta puesta nos hará reflexionar y dejar atravesar a lo que seguiremos sin cesar el argumento.
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