Una vez más sobre el escenario ya contaríamos con la participación de Nancy Duplaa, Cecilia Roth, Osmar Núñez, Malena Solda, Maria Fiorentino, Tamara Garzon Zanca, Monica Cabrera, Maju Lozano, Virginia Innocenti, Martin Slipak, Jorge Marrale, Valentina Bassi, Alejandra Radano, Pepe Monje, Florencia Raggi, Juan Palomino, Arturo Bonin, Ana Maria Picchio, Julia Zenko y Graciela Borges, entre muchos otros, acompañando a las Abuelas y los Nietos.
Cantaron León Gieco, Cecilia Rossetto, Sandra Guida, Fandermole, Oscar Lajad, y el cierre estara a cargo de Los Tekis.
También estuvo presente la comisión de TxI: Raquel Albeniz, Mathias Carnaghi, Susana Cart, Amancay Espindola, Cristina Fridman, Patricia Ianigro, Eugenia Levin, Julieta Rivera Lopez, Luis Rivera Lopez, Claudio Santibáñez, Mónica Scandizzo, Mauro Simone y Andrea Marina Villamayor.
Este es mi homenaje a Estela de Carloto, un pequeño relato que hiciera hace 5 años cuando todavía buscaba a Guido. Relato que fue el fruto de una taller literario que hiciera para ese entonces. Gracia por tu lucha Estela y también a todos los que te acompañan.
ESTELA
Se llama Estela igual que la de las abuelas de plaza de Mayo. Muchas parecen coincidir, aparte del nombre, es amable, tiene aproximadamente la misma edad y está de acuerdo con la causa que persiguen las abuelas. Sin embargo, para ella no es suficiente y considera que la lucha debe continuar y ahí está, con su pelo blanco, en la casa de las abuelas que parece una casa de reunión, a la espera de todos los nietos que gente de mala entraña los robó.
Ella llega todos los días a su despacho, como si fuera una oficina más, donde la esperan listas interminables de cosas a cumplir y que no piensa en dejar de hacer.
Y cuando se va la cosa no termina ya que, son todos amigos y tal vez se encuentre con un mensaje inesperado, llevándole a una pista para la recuperación de un nieto más.
Se llama Estela igual que la de las abuelas de plaza de Mayo. Muchas parecen coincidir, aparte del nombre, es amable, tiene aproximadamente la misma edad y está de acuerdo con la causa que persiguen las abuelas. Sin embargo, para ella no es suficiente y considera que la lucha debe continuar y ahí está, con su pelo blanco, en la casa de las abuelas que parece una casa de reunión, a la espera de todos los nietos que gente de mala entraña los robó.
Ella llega todos los días a su despacho, como si fuera una oficina más, donde la esperan listas interminables de cosas a cumplir y que no piensa en dejar de hacer.
Y cuando se va la cosa no termina ya que, son todos amigos y tal vez se encuentre con un mensaje inesperado, llevándole a una pista para la recuperación de un nieto más.