Sobre
la obra
Cuatro
cuerpos heterogéneos se fusionan entre sí en una combinación de movimientos,
música, objetos y significados abstractos de la carne…
La
idea nació de trabajar con cuerpos que se despliegan de distinta manera a través
del movimiento, para representar de manera abstracta y poética los cuerpos como
carnes.
La puesta en escena
quiere representar el ámbito de un frigorífico, de las reses y costillares
donde todo puede pasar, abriendo un abanico de posibilidades de la percepción a
través de la música y los movimientos de los intérpretes bailarines en
escena.
En éste ámbito se hace
referencia al sometimiento de las exigencias del medio, que a veces usa a las
personas no como tales sino como pedazos de carne, desnudando los cuerpos y
dejando a la vista de todos, las imperfecciones, virtudes y las emociones de
cada uno, volviendo al punto de ser usado como un pedazo de carne
viva.
COMENTARIO
En un escenario decorado con reses de carnes, diferentes cuerpos proponen con sus movimientos un sin fin de expresiones que van desde lo más natural mostrado por una figura en desnudo hasta lo que significa encuentros en momentos que se chocan y encuentran hasta parecer que en algún momento se contienen entre todos. Y no dejan de bailar acompañados por la música que los lleva a ir en un devenir constante sin dejar de mostrar una estética clara en forma permanente.
Ficha
Artístico Técnica
Intérpretes: Belinda
Actis, Nuria Vadell, Romina Alaniz, Damián Saban y Jorge Alberto
Música
original e Ingeniería de sonidos: Alberto
Quercia Lagos
Diseño
gráfico: Alejandro
Elizondo
Camcoder
VideoArte Danza: Roddy
Castro
Fotografía: Martín
Raviolo
Escenografía: Verónica
Vojcicki
Diseño de Iluminación:
Gustavo Soto
Vestuario: Marisa
Elorriaga
Asistente
de Producción: Alejandra
Centanaro
Prensa: Simkin
& Franco.
Composición
Coreográfica y Dirección General: Gustavo
Soto